Los diarios de Australia Capítulo 4

The Australia Diaries Chapter 4
Una invitación muy discreta salió de la boca del equipo de Noosa: "¿Alguien se anima a hacer un viaje por carretera mañana?". "Claro que sí. ¿Dónde y cuándo?", fueron las únicas palabras que respondimos. Cobertizo de Doc; las 5:30 am fue el llamado. Los vehículos estaban cargados de gasolina y con tablas, comida y cervezas (como era habitual), listos para el viaje. Tenían el aspecto y la sensación de una vieja caravana lista para abrirse camino en tierra extranjera (o playa), y para algunos de nosotros, era precisamente eso. El camino y la playa se unieron, convirtiéndose en una autopista abierta con kilómetros de arena hasta donde alcanza la vista de un ave local. Con Josh Constable a la cabeza, decidió que era hora de recuperar tiempo. Con un chasquido de látigo, la caravana aceleró. 150 km es la última vez que vi o quise ver... El sol naciente iluminaba el cielo de la mañana, porque hay algo que debemos ver y en lo que debemos adentrarnos en la aventura de este día. Cuando finalmente tiramos de las riendas y la caravana se detuvo, miramos hacia el mar. Al final de nuestro sendero, justo frente a nosotros, había un punto a la derecha... moliendo. Un grupo variado de surfistas: Salsa, Chalmers, Raini, Cuddles, Little Man y Monty (por nombrar algunos) en una mezcla de tablas como Bars of Soap, Espressos, Neil purchase Jr. single fins y troncos. Incluso sacamos una cuchara inspirada en Greenough que "Doc-n-Jake" construyó y una colchoneta inflable se metió en la rompiente solo porque pudimos. Pasamos cervezas y compartimos olas. ¿Por qué no? No había un alma a la vista. Mi último vistazo del día fue ver a "Doc-n-Rich Pavel" hablando de olas y formas del pasado, presente y futuro. No leo los labios, pero con las sonrisas y los gestos de las manos solo puedo imaginar lo que será cuando se reúnan de nuevo en el cobertizo de Doc, o incluso mejor, en "The Temple". El mismo sol que nos llevó hasta allí se ponía, era hora de recargar energías y retomar el sendero. Acababa de pasar un día realmente increíble, pero nunca terminará...