De las múltiples publicaciones en blogs sobre las últimas dos semanas llenas de diversión y todas las hazañas que el equipo ha estado haciendo, habrán notado, esperamos que estén prestando atención, que cierto rubio y bobo saltó a la vista. Para quienes no sepan de quién hablo, se trata del rider de Deus, Jason "Salsa" Salisbury. El oleaje lo animó a escabullirse antes de que comenzara el alboroto, llegando incluso a abandonar las costas de la isla. Lo dedicó todo a una breve misión de I+D para su nueva línea de ropa Deus, la "Revolución de Mochilas" de Salsa, que él mismo diseñó y ahora está probando. Sus cómplices fueron el hermano de Salsa, Chris, y su amigo, el experto en olas izquierdas y artista Nicholas Chalmers... Sabía que algo se tramaba, así que me uní a ellos, consciente de que algo iba a pasar y debía estar allí para capturarlo. De una manera que ya nos es familiar. El modus operandi nos hizo abordar el ferry al amparo de la oscuridad, rumbo al puntiagudo tramo de costa de una isla vecina. La misión a través de una de las fosas más profundas del mundo estuvo llena de baches y obstáculos, agravados por algunos de los peores caminos del mundo. Digamos que fue un alivio finalmente haberlo logrado. Todavía estaba completamente oscuro cuando llegamos; los chicos estaban sentados, expectantes, escuchando el familiar romper de olas de tamaño desconocido rebotando en el arrecife. El amanecer ni siquiera había llegado y ya estaban en el agua, y allí se quedaron prácticamente los siguientes tres días, descansando solo para hidratarse y recuperar energías. Aunque no fue todo el tiempo, la rompiente de la izquierda ofreció una buena cantidad de series considerables, lo que les dio al trío múltiples viajes a la sala verde y aún más sonrisas con dientes. Aquí tienen un breve resumen visual de esa escapada de 72 horas. ¡Disfruten! Fotos y texto de Tom Hawkins. 






































