Cuando se trata de motos personalizadas, nos gusta pensar que sabemos lo que le gusta a la gente (o simplemente lo que nos gusta construir), y la "Cross Breed" no es la excepción. Empezamos con una Yamaha SSX 225 Street Tracker de 2013, la desmontamos y la dejamos completamente nueva. Para empezar, fabricamos a mano un depósito de aleación pintado a medida, un escape personalizado con cono invertido y punta de aleación para un toque más dinámico en los paddies, guardabarros Deus personalizados, puños de goma marrón nuevos. Llantas japonesas TK con neumáticos Michelin Sirac que pican por entrar en las curvas, un velocímetro de lujo, luces de freno e intermitentes personalizados, y un asiento personalizado tan cómodo que no querrás parar de montarla. ¡Oye, es lo que hacemos! Disfruta del vídeo y nos vemos en la carretera.