Lo mejor del desierto. Silver State 300

Best in the Desert. Silver State 300
Pon la quinta marcha, mantén el acelerador a fondo, árboles y arbustos pasan volando a más de 145 km/h; así es como lo hacen los mejores del desierto. Fue un recorrido de 482 km que consistió en un camino de grava rápido, una pista de dos carriles con curvas y arena a través del alto desierto de Nevada, aproximadamente a 160 km al norte de... Las Vegas. Todo empezó tres semanas antes. Brandon "Tippy" Tipton y yo tuvimos la idea de correr la Silverstate 300 cuando un amigo nos contó lo divertidos y hermosos que son los paisajes del desierto de Nevada Central. Tippy había encontrado un par de viejas Honda CRF450X de 2006 que le habían abandonado un viejo compañero de carreras. Las recogió a un precio increíble, ya que llevaban guardadas en el fondo de su cobertizo casi una década. Necesitaban algo de mantenimiento, pero siempre hay algo en darle fuego a una moto de 13 años que nos motiva. Con la moto lista y la carrera decidida, llamamos a nuestro buen amigo y campeón de Pikes Peak, Baja y prácticamente cualquier carrera sobre dos ruedas, Carlin Dunne. Por supuesto, no nos costó mucho convencerlo. Zach "Muffin" Spano era el siguiente en la lista, actual tercer puesto en la general del Desierto del Sur de California; sabíamos que estaría a la altura. Con nuestro equipo de amigos motociclistas, que lo pasaron genial, partimos para nuestra primera carrera en el desierto. La carrera comenzó a las 5:45 a. m. y duró 5 horas y media a lo largo de un recorrido de 300 millas. Intercambiamos posiciones a lo largo del día y cruzamos la meta en sexto lugar de la general. Las noches en el garaje preparando la vieja moto de carreras y revisando el mapa, la persecución de boxes el día de la carrera, las cervezas compartidas después de una carrera bien hecha; por eso lo hacemos todos. La sensación de estar realmente vivo yendo a 145 km/h por un camino de tierra solitario, solo tú y tu moto. Eso es lo que siempre regresa. Quizás lo hagamos mejor la próxima vez, quizás no, pero una cosa es segura: será una experiencia increíble.