Esta es la historia de una experiencia que nace de la pasión por el ciclismo, la historia de una aventura que vive del entusiasmo y del compartir.
Lorenzo es de Milán, tiene poco más de veinte años y estudió arquitectura. Su amor por el ciclismo nació casi por casualidad; a menudo, los grandes amores nacen por casualidad, cuando menos te los esperas, esos son los que te permiten encontrar una salida a las dificultades de la vida. Eligió la bicicleta y la bicicleta lo eligió a él, y juntos iniciaron un camino de crecimiento y conocimiento que pronto se convirtió en su camino de vida.
Lorenzo demostró su pasión por el ciclismo en su trabajo y se convirtió en mensajero en una empresa recién fundada en Milán. Recoge y entrega paquetes de todo tipo por toda la ciudad y suele pasar por Deus Cycleworks.
Y mientras en Italia el tráfico afecta a las autopistas durante las vacaciones de verano de agosto, Lorenzo nos cuenta su viaje...
El Messenger ha fundado una comunidad internacional muy activa y llena de iniciativas. La más importante y sentida fue el Campeonato Mundial de Messenger, celebrado este año en París.
Lorenzo y cuatro amigos/compañeros partieron de Milán en avión y llegaron a Copenhague, donde participaron durante cuatro días en el Campeonato Europeo. Dormieron en un gimnasio gestionado por ellos mismos y, de la mañana a la noche, participaron en diferentes tipos de competiciones de equilibrio, velocidad y resistencia para poner a prueba sus habilidades ciclistas.
Al finalizar el Campeonato de Europa, volvieron a subirse a sus vehículos y recorrieron Dinamarca, atravesando los largos y espectaculares puentes daneses que conectan islas con tierra firme, acampando en los bosques, montando hamacas en vertiginosos miradores para disfrutar de la naturaleza y la paz desde lugares únicos.
Como en toda aventura, la actitud temeraria y el espíritu de adaptación son cruciales, por eso incluso bañarse durante días en el océano tenía su innegable encanto.
Un ferry los llevó a Colonia, Alemania, donde un gran grupo de mensajeros de todo el mundo se reunió para llegar juntos a París, su última parada. Cien kilómetros al día, repletos de actividades, como contrarreloj para que el traslado fuera entretenido y motivador, con noches cortas de campamento con fogatas encendidas.
Y luego París para el verdadero evento: LA CARRERA PRINCIPAL. Un circuito circular, cerrado al tráfico, con puntos de recogida y entrega, donde los participantes debían completar 20 retiradas y 20 entregas lo más rápido posible.
Después de esta experiencia, lo más importante es estar presente y dar lo mejor de uno mismo, porque esto no es una simple competición, sino un punto de encuentro que brinda la oportunidad de compartir la misma pasión y la misma actitud. Fueron días intensos donde personas de todo el mundo se encontraron y hablaron el mismo idioma.
Decidimos seguir a Lorenzo también en su próximo desafío, el Campeonato Italiano Messenger, decidimos contar su historia para resaltar el valor que hay detrás de las pasiones y tratar de compartir las emociones que solo el ciclismo puede dar.
Esta es la historia de una experiencia que nace de la gran pasión por la bicicleta, y la historia de una aventura que se nutre de entusiasmo y condición.
Lorenzo es un ragazzo di Milano, ha poco más de vent'anni e studia architettura. Il suo amore per la bicicletta è nato quasi per caso, perché molto spesso i grandi amori nascono per caso, quando meno te lo aspetti e sono quelli che ti permettono di trovare “una via di fuga” in un momento della vita poco felice. Ha scelto la bici e la bici ha scelto lui, ed hanno iniziato insieme un percorso di crescita e conoscenza che molto presto si è trasformato in percorso di vita.
Lorenzo ha podido declinar su pasión por la bicicleta en su profesión, y diventato Messenger en una giovane azienda milanese. Si occupa di ritirare e consegnare pacchi di ogni tipo in tutta la città e molto spesso nei suoi giri di ricognizione si ferma in Deus Cycleworks.
E mentre i bollettini del mes de agosto decretano le solite code chilometriche del rientro lungo la nostra peneola, Lorenzo ci racconta del suo viaggio…
Messenger ha creado una comunidad internacional, muy activa y rica en iniciativas, que es más importante y más sentida y el CYCLE. DESORDEN. MUNDO. MORDER. il Campionato del Mondo dei Messenger, quest'anno a París.
Lorenzo ed altri quattro amici/colleghi sono partiti da Milano ed in aereo hanno raggiunto Chopenagen, dove per quattro giorni hanno partecipato ai Campionati Europei. Hanno dormito en una palestra autogestita e dal mattino fino alla sera hanno partecipato a competizioni di vario tipo, di equilibrio, velocità, resistenza che hanno messo alla prova le abilità dei ciclisti.
Conclusi gli Europei sono saliti in sella ai loro mezzi ed hanno atraversato la Dinamarca, passando sopra i longhi e spettacolari ponti danesi che collegano tra loro le innumerevoli isole del paese, campeggiando nei boschi ma più spesso montando amache in punti vertiginosi, per godersi lo spettacolo e la pace da un punto di vista unico.
Come in tutte le avventure non può mancare un pizzico di incoscienza e lo Spirito di adattamento altissimo, per este motivo anche lavarsi per giorni nell'oceano ha avuto il suo fascino innegabile.
Un traghetto li ha portati in Germania, a Colonia, dove un foltissimo gruppo di Messenger proveniente de todo el mundo si era dato appuntamento per raggiungere insieme la destinazione ultima, París. Un centinaio di chilometri al giorno, pieno di diversivi, come tratti a cronometro, per rendere più divertenti e motivanti i trasferimenti, brevi notti in campeggio con le luci dei falò.
E poi París. Qui si è svolto il vero evento THE MAIN RACE, un circuito chiuso, chiuso al Traffico, costellato da punti di ritiro e consegna, dove i partecipanti dovevano portare a termine nel minor tempo possibile, 20 ritiri e 20 consegne.
E quando finisce tutto, la cosa más importante y esserci stati ed avere dato il meglio perché questa non è solo una simple competencia, ma un ritrovo, un momento di condivisione della stessa passione e con lo stesso Spirito. Sono stati giorni intensi dove ragazzi di tutto il mondo si sono trovati e ritrovati, e dove nonostante tutto si è parlata la stessa lingua.
Abbiamo deciso di seguire Lorenzo anche nella sua prossima sfida, i Campionati Italiani di Messenger, abbiamo deciso di raccontare la sua storia per sottolineare il valore che hanno tutte le passioni e per cercare di far rivivere le emozioni che solo la bicicletta può dare. 




















